Las visitas teatralizadas son una de esas experiencias que los grupos escolares no olvidan.
¿Por qué? Porque no solo observan… ¡viven! El alumnado recorre espacios con valor histórico, artístico o cultural mientras va encontrándose con personajes reales: un poeta del Siglo de Oro, una científica olvidada, un comerciante de otra época… Cada figura cuenta su historia, propone juegos, lanza preguntas y convierte la visita en un auténtico viaje en el tiempo.
Estas visitas están pensadas para ofrecer contenidos adaptados al nivel educativo, conectando directamente con los temas que se trabajan en el aula: historia, literatura, ciencias sociales o incluso valores cívicos. La narración, el humor, la interacción y la dramatización se combinan para que los y las estudiantes aprendan mientras disfrutan.
Además, estas experiencias permiten un tipo de aprendizaje mucho más emocional y significativo, donde se estimula la curiosidad, la escucha activa y el pensamiento crítico. Una propuesta ideal para reforzar contenidos del aula de forma amena, dinámica y con mucho gancho.
Se podrá tomar el almuerzo antes o después de la actividad.
El alumnado comprenderá mejor los contenidos históricos y culturales a través de una experiencia sensorial y emocional en la ciudad elegida. Las visitas teatralizadas refuerzan el aprendizaje significativo, fomentan la curiosidad y la atención, y potencian la empatía al ponerse en la piel de personajes de otra época.


